Y acuérdate Guillermo de cómo lloraste al enterarte de que te habían eliminado de Becas Europa, acuérdate de cómo lloraste cuando suspendiste el B1 de Euskera. Acuérdate de cómo lloraste al salir de Proficiency, del examen que tanto habías preparado y trabajado. El examen que probablemente suspendas, no por falta de conocimientos sino por imbécil.
El examen que después de haber hipotecado 10 mañanas de sábado. Después de haber estado encerrado en una academia 6 horas cada sábado, después de haberte privado de salir a cenar, o a tomar algo con tus amigos probablemente te venza.
Acuérdate de lo duro que es que te salga mal algo por lo que has luchado tanto. Y Acuérdate también de que ninguno de ellos pudo contigo. Te volviste a presentar al B1 y lo aprobaste y te volverás a presentar al examen de inglés y también lo aprobarás. No me cabe duda. El nivel lo tienes. Te han podido los nervios. Bien jugado cabrones. Pero que sepáis que habrá venganza, y de esa ya no saldréis.
Sabed queridos nervios o lo que sea que me haya traicionado, que voy a volver. Que voy a levantarme, me acordaré de las lagrimas que me habéis sacado y de lo que me habéis hecho sufrir.
Pero vosotros, vosotros os tendréis que acordar de que no pudisteis conmigo.
«SEPA USTED QUE LA DEPRESIÓN NO SE CONOCE EN ESTA CASA Y NO ESTAMOS DISPUESTOS A ESTUDIAR LAS POSIBILIDADES DE DERROTA, NO EXISTEN» QUEEN VICTORIA.